Recuperar el cariño. Momento 3. Acariciar

Esta acción se refuerza con la frase: “Cada persona es ‘persona de personas’, ‘ánima de ánimas’”[1]. De forma previa solicito al público que traiga un cojín de casa con tal de generar una situación amable, cómoda y hogareña. Al igual que en el Momento 2, me pongo a ras del suelo, eso sí, en un ambiente totalmente diferente. Sustituyo las luces blancas de la sala por tres bombillas que ofrecen una iluminación suave y cálida. Estas bombillas descansan directamente en el pavimento. Deposito algunos cojines y mantas por la sala, por si llega algun+ despistad+.

Mi intención es elaborar un ambiente propicio para comunicarnos a través del lenguaje no verbal de la caricia, encontrando nuestros cuerpos. Piel con piel, con calma, entro en contacto, primero con un hombre, cerrando los espacios entre nosotros. Al transcurrir unos minutos, cuando la ternura, la simpatía y el roce se han consumado, tomo su mano y me dirijo a la siguiente persona, estableciendo un nuevo acercamiento. Esta dinámica la ejecuto con cada nuevo paso, pero la mano siempre vuelve a su lugar. No logro que el grupo se cohesione en un gran abrazo, pero sí consigo mucha intimidad dedicándole a cada asistente un tiempo de encuentro, escucha, atención y cuidado.


[1] Rengifo, G. (2021). RETORNO A LA NATURALEZA. Apuntes sobre cosmovisión amazónica de los Quechua-Lams. Recuperar el cariño, Ciudad de México, México: Palapa Editorial El Rebozo.

Recuperar el cariño. Momento 3. Acariciar. 14 de septiembre de 2022. Performance en Fantastik Lab. 1h 15’.

Fotos: Manuel López.