inventario

Para hablar de lo que surge del ejercicio artístico ningún lugar mejor que el propio estudio. Con motivo de la primera presentación de residual envolví con papel craft -un material pobre- todos los elementos que conforman mi espacio de trabajo. La finalidad consistía en que los objetos no se pudiesen ver, sin que ello alterase su forma ni su disposición habitual. El resultado competía con lo que en verdad se mostraba, el excedente, el desperdicio, creando una tensión visual entre lo que se enseñaba y lo que se cubría.

Embalar cada uno de los objetos que conformaban mi taller supuso así un ejercicio de inventariado. Aprovechando el trabajo realizado, decidí documentar cada uno de los objetos envueltos para producir una pieza fotográfica que dejase al desnudo el proceso. Como si de pronto invirtiese el estudio, muestro los objetos empapelados, el embalaje vacío y el objeto descubierto, conformando una nueva instalación que cuenta con un conjunto de 159 trípticos fotográficos y un tubo de cristal que contiene todo el papel craft empleado.